y sus hombres serán
los sacerdotes del hombre,
y cada hombre será
su propio sacerdote.
Vamos, compadezcamos a los que están mejor que nosotros,
Vamos, amigo, recordemos que los ricos tienen camareros y no amigos
Y nosotros tenemos amigos y no camareros.
Vamos, copadezcamos a los casados y a los no casados.
La aurora entra con pasitos menudos como una dorada Pavlova,
Y yo estoy junto a mi deseo.
Y la vida no tiene nada mejor.
Que esta hora de diáfana frescura, la hora de despertarnos juntos.
Extraido de Ezra Pound, Antologia, Colección Visor de Poesía 93 (1983).
Yo junto estas palabras para cuatro personas,
Algunos más pueden oirlas,
Oh mundo, lo siento por ti,
Tú no conoces a estas cuatro personas.
Extraido de Ezra Pound, Antologia, Colección Visor de Poesía 93 (1983).
Están los dos mundos dormidos, están durmiendo ahora.
Un enmudecimiento los domina en una especie de solemnidad.
El yo y la tierra: tus pensamientos, tus sentimientos,
Tus creencias y descreencias, toda tu peculiar trama;
la rojez de tus roijizos castaños,
el discurrir del río, el discurrir amodorrado del río R.
Extraido de Wallace Stevens, La Roca, Lumen (2008), pág. 9.
Un feo ceño enrocado en el no
ataca la tiranía del si
provocando un silencio
entre la disculpa y el por favor
miradas lanzadas al suelo
con el arrojo de la sangre corriendo
en el camino de la reserva al tifón
Convivencia descompuesta
en piezas de tierna confusión.
La tiranía del sí y del no.
Una opinión queda oculta por el mantel
y la nocturna mano
que busca mano
recupera los pilares del harmónico
concierto para mi voz y tu voz
con variantes de bemol.
En el final del mundo no hay ventanas os pensáis que se ve bonito y solo se ven heridas, lágrimas un dolor que tapa la ropa que no se dice ...