jueves, 21 de agosto de 2008

Jose Maria Fonollosa - Destrucción de la mañana


Y de pronto una voz, mirada, un gesto



tropieza con mi idea de mí mismo



y veo aparecer en el espejo



a un ser inesperado, insospechado,


que me mira con ojos que son míos.





Ese desconocido que soy yo.



Ese al que los demás se dirigían



al dirigirse a mí, sin yo saberlo.




Ese irreconocible ser inmóvil



que inspecciona mis rasgos hoscamente.




En vano apremio al otro, el verdadero,



a aquel que unos segundos antes yo era.



Sólo está frente a mí, con ceño adusto,



ese desconocido inesperado



que me mira con ojos que son míos.



agradecimientos: http://mimundoreloco.blogspot.com/





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