Éste es el único de mis relatos cuya moraleja conozco. No creo que sea una moraleja extraordinaria.
Sólo que en esta ocasión sé cual es:
somos lo que aparentamos ser, así que debemos tener cuidado con lo que aparentamos ser.
(...)
Pero hay otra clara moraleja, ahora que lo pienso: cuando uno está muerto, está muerto.
Y todavía se me ocurre una tercera moraleja: hagan el amor cuando puedan. Les sentará muy bien.
Kurt Vonnegut, Madre Noche, Círculo de Lectores (1988), 17-19.
Sólo que en esta ocasión sé cual es:
somos lo que aparentamos ser, así que debemos tener cuidado con lo que aparentamos ser.
(...)
Pero hay otra clara moraleja, ahora que lo pienso: cuando uno está muerto, está muerto.
Y todavía se me ocurre una tercera moraleja: hagan el amor cuando puedan. Les sentará muy bien.
Kurt Vonnegut, Madre Noche, Círculo de Lectores (1988), 17-19.
No hay comentarios:
Publicar un comentario