No puedo ver,
pero sé dónde estan,
las cadenas.
que tocan a otras.
Te tocan a ti también.
pero tampoco los ves.
Somos hiel.
En el desorden de las mariposas
todo es amor.
Con su espiritrompa besan
larga y lánguida
disfrutando del dulce contacto
de una lengua que ama.
No hay malas palabras,
ni tampoco gritan,
las mariposas,
preciosas ellas con su cariñoso
batir de alas.
Pero hay dias que la lengua amorosa
que no dice nada grave
golpea fuerte
se enrolla fuerte
nos ata fuertemente
y ese dia sigue el desorden inundado
de amor y besos
que se hienden en la piel
corta la carne y se engancha a los huesos
lamiendo el tuétano.
Las mariposas, en desorden, clavan su amor en el corazon
(lo sé, niño, lo siento)
y me quedo atrapado
entre silencios vanos
en el querer bello y solido como
un beso de hierro
que marca el corazón
a fuego.
(su batir de alas
su fragil aliento
su bello existir)
Y silencio.
En el final del mundo no hay ventanas os pensáis que se ve bonito y solo se ven heridas, lágrimas un dolor que tapa la ropa que no se dice ...