jueves, 3 de septiembre de 2009

Ven

Rásgate las ropas.
Arráncate la piel.
Sácate los ojos.

Deja tus cabellos deshoyados
en aquel cajón.



Y entonces, ven.


Pensando en un amigo II

¿Y si te digo que ya no estàs?

Tengo un nudo degollado en el bolsillo.



Tiempo de decir adiós,
tiempo de decir amigo,
tiempo de vinagre y calor,
tiempo de desierto, de destino,
en la patria árida de las lluvias
y los padrinos, la noche te acogerá
con los pechos de una madre
y las palabras que nunca nos dijimos.



En el fondo de la tarde,
sin siquiera haberlo previsto,
he perdido un refugio
en la ausencia del camino.


miércoles, 2 de septiembre de 2009

Pensando en un amigo

Una cerveza vacía,

un cigarrillo encendido,

todos los libros del mundo

atados al cuello desafinado

aprendiendo a ser amigos

con mi inseparable paranoya

y la palabra por castigo,

el silencio es una sombra

que pesa sobre el antónimo idealizado del ombligo.

Las noches de tanto tiempo

se nos perdieron en alguna esquina,

cuando no sabíamos ser y eramos tan poco

que al final, sin querer,



fuimos.



jueves, 20 de agosto de 2009

Mario Benedetti - El Sur también existe

Con su ritual de acero
sus grandes chimeneas
sus sabios clandestinos
su canto de sirenas
sus cielos de neón
sus ventanas navideñas
su culto a dios padre
y de las charreteras
con sus llaves del reino
el norte es el que ordena

pero aquí abajo abajo
el hambre disponible
recorre el fruto amargo
de lo que otros deciden
mientras que el tiempo pasa
y pasan los desfiles
y se hacen otras cosas
que el norte no prohíbe
con su esperanza dura
el sur también existe

con sus predicadores
sus gases que envenenan
su escuela de chicago
sus dueños de la tierra
con sus trapos de lujo
y su pobre osamenta
sus defensas gastadas
sus gastos de defensa
son su gesta invasora
el norte es el que ordena

pero aquí abajo abajo
cada uno en su escondite
hay hombres y mujeres
que saben a qué asirse
aprovechando el sol
y también los eclipses
apartando lo inútil
y usando lo que sirve
con su fe veterana
el sur también existe

con su corno francés
y su academia sueca
su salsa americana
y sus llaves inglesas
con todos sus misiles
y sus enciclopedias
su guerra de galaxias
y su saña opulenta
con todos sus laureles
el norte es el que ordena

pero aquí abajo abajo
cerca de las raíces
es donde la memoria
ningún recuerdo omite
y hay quienes se desmueren
y hay quienes se desviven
y así entre todos logran
lo que era un imposible
que todo el mundo sepa
que el sur también existe.





[dedicat al Esteban, que també existeix].




miércoles, 19 de agosto de 2009

Teatro

La soledad desparejada que se
sienta esquinada en un rincón,
las aristas conjuradas a clavarse
en la retina,
los números de feria y lotería
sorprenden a la ilusión.


El salón baldío que transciende
más allá de la mísera estancia
de familia hecha pendencia,
hecha desagüe,
costra blanda de la incoherencia
adosada a las nubes de la carne,
desdibujados retazos pasados del
viejo desatino atolondrado
de la pasión.



En todo aquel mugriento recuerdo salado
rige la ley del teatro:
los cordones de las marionetas,
compuestos de un sucísimo barro,
se secan bajo el acalorado golpear
del silencio,
agresión distante y consciente
contra cuanto significaban
siempre
vuestros abrazos.



Una vez.

Una vez abajo,
el telón disiente del texto acordado,
y con trémulas grafías de intestino delgado
rasga sangre, rasga voz,
rasga mentiras
para caer yaciendo,

telón, velada y engaño,
sin recuerdos emparentados,
sin nombre de apellido,
sin aplauso.


viernes, 3 de julio de 2009

prometido

Prometo que el alba te encontrará siempre
desnuda,

prometo que nunca dirás
jamás,
prometo que la sombra de tu mano será
la mía,
prometo dos besos diarios,
uno para la noche, otro para el día,

prometo acompasar el ritmo y la
melodía,
prometo sostenerle al tiempo
la mirada,
por ser nosotros, seremos vida,
prometo cubrirte con el cielo,
salarte con el mar,
ser sentido y pregunta,
silencio y charla,
para llenar tu ombligo
de curiosidad encarnizada,
prometo buscar en tu cuerpo el delirio dibujado
por la ropa más íntima de nuestro ajuar.



Te prometo que uno y uno sumarán
mucho más que dos,
te prometo pequeños momentos de azucar
desparramados en la mesa de cualquier bar,
te prometo ser pan si tu quieres ser
agua,
te prometo soñar.

Prometo un vientre enchido por días,
meses,
con sus mil mañanas,
y cuando el sol se ponga,
saldremos a bañar el rocío
con tus ojos de guirnalda.
Te prometo ser estío,
y luego, inviernos de estufa y manta,


todas las palabras del destino,
la luna y el sol echos anillo,
te prometo mi hogar.



Te prometo el mundo completamente florido,
y si no falto a mi palabra,
prometo no ser más
nada
nada más.


lunes, 29 de junio de 2009

Las dos viejas

En la mano un bolso de abuela.
La vieja, todo sonrisa, con su piel
de naranja y su mirada de cera.

Del brazo la acompaña una amiga,
casi tan antigua como las modas
y las coherencias.
Pasean, aisladas del ruido por
el compartido diálogo de la sordera.



Se caminan los puestos, los jovenes
que meten mano en los vaqueros de sus parientas;
las caminantes comentan,
rien, probablemente ni piensan.
El tiempo está de su parte

en la tierna ingenuidad de un atardecer
del dorado final de la primavera,
la mano, el bolso,
la compañía ineludible sube y baja las ramblas
con el recuerdo como aliado
y la noche entre las piernas.


Finis Terrae

 En el final del mundo no hay ventanas os pensáis que se ve bonito y solo se ven heridas, lágrimas un dolor que tapa la ropa que no se dice ...